Los juegos de construcción son un recurso para los más pequeños durante toda su infancia. Cuando comienzan a desarrollar sus capacidades motoras empiezan a encontrar su motivación en formar cosas por ellos mismos.
Para que puedan ser empleados desde sus primeros meses de vida se han ido desarrollando cubos, elementos, animales o figuras, en todos los materiales que cumplen con su seguridad y con las garantías necesarias para que este tipo de juego se desarrolle de forma segura.
Apilar, destrozar, jugar, crear, volver a empezar una y otra vez, probar y equivocarse… son aprendizajes altamente saludables para el desarrollo cognitivo de los niños y también para su desarrollo psicomotor y social. Gracias a los apilables o juegos de construcción, los niños pueden comenzar desde una edad muy temprana a fomentar sus habilidades motoras, cognitivas, sensoriales, sociales y emocionales.

