1. Fomenta el compañerismo.
Jugando a los bolos se afianzan lazos de amistad y se fomenta una relativa competencia sana. Es habitual que una actividad como los bolos esté presente en las actividades de teambuilding a las que recurren ahora las empresas para crear equipos altamente efectivos.
Cuando vas a jugar bowling lo haces con un grupo de gente, y pasar horas compitiendo y divirtiéndote mientras comes algo o tomas un trago hará que socialices con la gente, y puedas crear nuevos lazos de amistad.
Practicar deportes como el bowling fomenta la socialización, ya que se conoce a personas nuevas y se generan una serie de recuerdos y experiencias compartidas con el otro. ¡Anímate!
2. Liberar estrés.
Hablamos de una actividad que ayuda a relajarse, perfecta para aquellas personas que, tras una dura jornada de trabajo, buscan una forma lúdica de evadirse.